El sector privado del turismo de reuniones de la ciudad de Buenos Aires se encontraba analizando en detalle los protocolos para el regreso de la actividad, tras un año de parálisis. Más allá de celebrar la habilitación, advirtieron que el documento prohibe la construcción de stands, medida que atenta contra el corazón del negocio, especialmente el de exposiciones.
El 26 de febrero pasado el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires había anticipado la aprobación de los protocolos de bioseguridad para el regreso de los eventos presenciales en la capital de la Argentina, a partir de marzo.
En esa oportunidad, se informó también que el sector privado del segmento MICE de la ciudad se encontraba analizando la letra chica de estos protocolos -que venían trabajándose en conjunto desde hacía meses-, para evaluar la aplicabilidad de las medidas impuestas finalmente.
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